La presentación
Como muchos, me había preguntado cuál es la mejor manera de darme a conocer como persona y artista ante un mundo globalizado que está inmerso en la tecnología. A continuación te contaré una pequeña anécdota sobre ello.
El viernes pasado fui a la inauguración de la obra de Armando Romero en la galería NM Contemporáneo que está en la ciudad de Cuernavaca, Morelos, en México. Unas semanas antes estaba exhibiéndose obra mía online y había mandado un boletín a mis contactos sobre mis actividades. Entre ellas estaba la apertura, un video sobre el proceso de la obra expuesta que realicé junto con un exalumno quien ahora es mi asistente y una entrevista que me realizó la curadora Jeelan Bilal-Gore desde Nueva York.
Nunca me imaginé que tendría alguna respuesta por parte de mis contactos. Mi sorpresa fue cuando llegué a la galería y antes de que terminara de leer el texto de sala ya me había abordado Rene Díaz, un colega a quien aprecio mucho. Platicamos sobre política, arte, galerías y ferias, entre otras cosas. También me comentó estar enterado de mis actividades en Barcelona y en Nueva York.
Después de un tiempo me di cuenta de que mi copa estaba vacía, así que fui a buscar un poco más de vino. En el camino me encontré con Uli Solner, escultora. Finalmente, no llegue al vino, él vino a mí. Es decir, mantuvimos una amena plática y me presentó a Humberto Peraza, otro escultor. Uli nos invitó a Casa Gabilondo (lugar que alguna vez fuera casa de Gabilondo Soler Cri-cri) a cenar, por supuesto aceptamos. Ahí bailamos, tomamos y comimos; la pasamos muy bien. También surgió una invitación a otra inauguración para el día sábado, pero yo tenía que dar una clase de pintura por la mañana, por ello no fui. Debo contar que antes de salir de la galería y de terminar de ver la obra expuesta, me encontré con Carmen Rosa, la dueña de la NM. Mi sorpresa fue cuando me dijo estar igualmente informada sobre mis actividades.
En conclusión considero importante la promoción de actividades por internet, pero más importante el poder convivir con las personas. Siempre tratando de dar a los demás sin pedir nada a cambio.
Miguel Angel Reyes
